Halli Galli celebra su 25 aniversario este año, por lo que se presenta con una nueva edición con unos componentes mejorados y llega de la mano de Mercurio completamente en castellano.
Se trata de un juego sencillito de agilidad visual en donde a cada jugador se le entrega un mazo de cartas que muestran a frutas tocando instrumentos y de diferentes colores. Por turnos los jugadores van girando las cartas de sus mazos cara arriba y en el momento en que las cartas compartan dos propiedades, como por ejemplo que sean del mismo color y que estén tocando el mismo instrumento, habrá que tocar el timbre que está situado en el centro de la mesa. Habrá que ser rápido puesto que el jugador que primero lo haga tomará todas las cartas y las colocará debajo de su mazo. En el caso de que alguien se equivoque y toque el timbre por equivocación, deberá de dar una carta a todos los demás jugadores.
Según los jugadores se vayan quedando sin cartas quedarán eliminados y el juego terminará cuando al quedar dos jugadores se vuelva a tocar el timbre de nuevo y ahí el que tenga más cartas, habrá ganado la partida.
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